Tres herramientas filosóficas que te ayudarán a manejar situaciones cotidianas

Acercarse a la filosofía es una actividad que requiere análisis, pensamiento constante y el cuestionamiento de todo lo que experimentamos, incluyendo la forma en que pensamos. Comprender algunas de las características que aporta la filosofía, puede darnos herramientas útiles para la vida diaria. Aquí hay tres herramientas filosóficas para aplicar en tu vida:

Resolución de problemas

La filosofía nos ayuda a ver más allá de un problema y una solución. Se trata de analizar cómo se entiende un concepto según su contexto, cómo se sustentan los argumentos y cuáles son los problemas esenciales que resuelven esa duda concreta. Nos lleva de entender lo general a tratar con lo específico. Nos ayuda a estudiar las posibilidades que rodean al problema; las que coinciden con lo que pensamos y las que son opuestas. Involucrarnos en el espacio de cuestionar todo lo que acompaña a nuestro problema, nos permite pensar críticamente. Aquí hay un ejemplo que podemos aplicar en nuestro contexto:

A la hora de lanzar una campaña, es fundamental tener una idea clara de lo que estamos haciendo. Esto se logra formulando las preguntas correctas sobre lo que se está desarrollando. Pero aún más importante, es anticiparse a los posibles resultados, buenos o malos, tener un plan de contención en caso de que no salga según lo previsto, teniendo en cuenta las posibilidades de lo que podría suceder.

Comunicación

Dado que la filosofía nos confronta constantemente para analizar por qué pensamos de la manera en que pensamos, nos permite desarrollar habilidades de expresión y comunicación. Nos ayuda a entendernos a nosotros mismos, cómo pensamos, cuál es nuestra realidad, en qué se diferencia nuestra realidad de la de los demás y cómo nos situamos en una realidad distinta a la nuestra. Al principio, estas preguntas pueden parecer muy amplias, pero a medida que comenzamos a reconocer y comprender nuestro ser interior, desarrollamos herramientas que facilitan la expresión. Si entendemos nuestra posición sobre un tema lo suficientemente bien, será más fácil decidir el siguiente paso. Esto sucede mucho en el lugar de trabajo. A menudo nos encontramos en situaciones en las que dudamos de si nuestra participación contribuye, temiendo decir algo mal. Pero si de lo que queremos hablar es algo sobre lo que nos sentimos seguros, podemos intentar hablar de ello con nuestros colegas para encontrar diferentes pensamientos y opiniones que conduzcan a un mejor resultado.

Habilidades de escritura

A través de la lectura de diferentes textos filosóficos, tenemos la oportunidad de conocer interesantes ensayos literarios con mucho contenido para examinar. No solo están llenos de preguntas sobre la vida, situaciones y conceptos abstractos, sino que también representan un desafío de lectura. Una actividad de cuestionamiento exhaustivo para entender el texto, identificar cómo ese autor específico concibe un concepto, leer los argumentos y generar una opinión sobre ellos y poder traducir estos temas en ejemplos claros que nos sitúen en problemas de la vida real, nos permiten hacer un análisis más profundo de diferentes escenarios, mientras desarrollamos nuevas habilidades de escritura.

Al no dar por sentado todo lo que vemos y percibimos a nuestro alrededor, ampliamos nuestro conocimiento y entendemos diferentes perspectivas sobre nuestra realidad. Recuerda que la sabiduría no proviene exclusivamente de los estudios académicos, sino principalmente de la experiencia. ¡Así que sigue cuestionando todo lo que te rodea!